La Comisión Europea ha decidido este jueves remitir a España ante el TJUE por la mala calidad de su aire, al sobrepasar de forma constante los límites de dióxido de nitrógeno (NO2). El dióxido de nitrógeno (NO2) procede principalmente de actividades humanas, como el tráfico por carretera, sobre todo de los vehículos diésel, y la industria.
Los datos más recientes sobre la calidad del aire español confirman el incumplimiento sistemático de las normas de la UE respecto a los índices de dióxido de nitrógeno, según informa el órgano ejecutivo comunitario.
Se constatan altos niveles de contaminación en zonas urbanas como Madrid y Barcelona. España casi 9000 muertes prematuras al año son atribuibles al exceso de dióxido de nitrógeno.
Los países miembros de la UE tienen un compromiso para adoptar planes de calidad del aire y garantizar medidas adecuadas para que los valores sea lo mas bajos posibles. Los niveles de calidad del aire en la Unión y las obligaciones de los Estados Miembros con respecto a este compromiso están regulados en la Directiva 2008/50/CE del Parlamento Europeo, de 21 de mayo de 2008 relativa a la calidad del aire y a una atmósfera más limpia.
La decisión de la Comisión se apoya en el incumplimiento del deber de colaboración entre los Estados miembros para lograr el objetivo marcado por la Comunicación de la Comisión «Una Europa que protege: Aire puro para todos» de mayo de 2018.
La contaminación atmosférica sigue siendo, según la Comisión, el principal problema de salud ambiental de la UE.
Según las estimaciones que maneja el organismo comunitario, anualmente 400.000 muertes prematuras son atribuibles a la contaminación atmosférica, y unos costes económicos directos superiores a 20 000 millones de euros al año.